Brasil tiene la policía más letal del mundo y se refleja directamente en la actuación violenta durante las manifestaciones callejeras, principalmente en São Paulo, dejando a la gente ciega, lesionada y decenas de presos políticos. Situaciones que nos recuerdan los tiempos de la dictadura militar en Brasil (1964-1985) y amenazan la libertad de expresión. Esa marcha violenta continúa, pero no podemos ver el camino a través de la densa nube de gases lacrimógenos.