Molly Windsor se ha convertido en una de las actrices británicas con mayor presencia en la pantalla y en protagonista absoluta de la ópera prima de Claire Oakley, quien se sirve de Windsor y los impresionantes parajes de Cornualles para construir esta historia sobre la identidad, la libertad, el amor y el paso a la madurez, pequeña pieza de orfebrería cinematográfica, inmersiva y sensorial, que se revela mucho más compleja de lo que aparentemente parece según su trama va incorporando códigos del thriller y el cine de terror a los presupuestos del melodrama de los que parte.
NO RECOMENDADA A MENORES DE 18 AÑOS.
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