"João Bénard da Costa fue el director de la Cinemateca Portuguesa durante dieciocho años. Caminé por su memoria y descubrí a su amor por la pintura, por la iglesias, por Proust y Musil, por Italia, por las películas, por Mozart y por sus amigos. Pero lo que realmente quise representar es al hombre contradictorio de carne y hueso, al hombre libre" Manuel Mozos.