Un cineasta sin mucho de éxito está inmerso en el rodaje de su nueva película cuando unos terribles asesinatos empiezan a tener lugar en Barcelona, y todos parecen tener relación con el director. Entre el terror y la comedia, la nueva obra de Ferrer es un explosivo cóctel giallo y queer, una película sobre la tenacidad de un cineasta iluso que se obstina en hacer una película tras otra a pesar de sus fracasos: porque las películas hay que hacerlas. Como sea.